[La Tercera] La deflación industrial de China se modera en julio ante los indicios de recuperación.

Por Agencia Reuters

La deflación de las fábricas de China se suavizó en julio, como consecuencia del aumento de los precios mundiales del petróleo y de la recuperación de la actividad industrial hacia los niveles anteriores al virus, aportando nuevas señales de recuperación en la segunda economía más grande del mundo.

El índice de precios al productor cayó un 2,4% en julio con respecto al año anterior, según declaró el lunes la Oficina Nacional de Estadísticas, en comparación con la caída del 2,5% que se había previsto en una encuesta de analistas de Reuters y una caída del 3,0% en junio.

Los analistas dicen que la producción industrial de China está volviendo a los niveles que se veían antes de que la pandemia paralizara grandes sectores de la economía, ya que la demanda acumulada, el estímulo del Gobierno y la inesperada resistencia de las exportaciones están propiciando una recuperación.

Los precios de los futuros del mineral de hierro en Dalian han subido más del 50% en lo que va de año, mientras que los precios de las barras de acero utilizadas en la construcción han subido un 12%.

Los precios de la extracción de petróleo y gas natural lideraron las ganancias del índice general, con un aumento del 12% intermensual, gracias al continuo repunte de los precios mundiales del crudo, según Dong Lijuan, un estadístico del organismo. Los precios de la minería de carbón y la fabricación de automóviles también se volvieron positivos en julio.

“Un nuevo aumento del estímulo fiscal debería continuar apuntalando el gasto en infraestructuras en los próximos meses, apoyando una mayor recuperación de la actividad económica y de los precios de producción”, dijo Julian Evans-Pritchard, economista de Capital Economics para China.

[DiarioFinanciero] CAP logra fuerte aumento en sus utilidades en primer semestre pese al coronavirus

Por: Karen Peña

Los resultados se explican a la recuperación de la capacidad de producción y despachos de mineral por la entrada en operación del puerto Guacolda II. Mientras, el nuevo gerente general, Julio Bertrand, espera una cierta recuperación de los mercados para fines de año.

Un fuerte aumento en sus utilidades reportó CAP en su entrega de resultados correspondiente al primer semestre en medio de la pandemia por el Covid-19. Según informó a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), la compañía logró US$ 94,6 millones respecto a los US$ 14,5 millones alcanzados en los primeros seis meses del año pasado, representando un alza de 571% en este ítem. 

En esa línea, la utilidad neta consolidada del grupo al 30 de junio llegó a US$ 58,3 millones frente a los US$ 830 mil alcanzados el año pasado. Mientras, los ingresos y EBITDA del grupo CAP alcanzaron US$ 1.062 millones y US$ 288 millones, representando aumentos de 31,2% y 98,7% en relación con los US$ 809 millones y US$ 145 millones obtenidos en igual período del año pasado.

En su análisis razonado, la compañía explica que la principal razón detrás de la mejora en los números consolidados se debe a la recuperación de la capacidad de producción y despachos de mineral por la entrada en operación en diciembre del año pasado del puerto Guacolda II de CMP, cuyos ingresos y EBITDA del primer semestre de 2020 llegaron a US$ 716 millones y US$ 264 millones, respectivamente. Lo anterior, representa aumentos de 82,2% y 104,1% al compararlos con los US$ 393 millones y US$ 130 millones registrados en igual período del año anterior.

A través de un comunicado, el recién asumido gerente general de CAP, Julio Bertrand, abordó los efectos que ha tenido la pandemia por el Covid-19 en Chile y el mundo. Si bien reconoció que habrá que seguir monitoreando la evolución de esta crisis y sus efectos, «hemos constatado que se mantiene la estabilidad en el precio del mineral de hierro en niveles razonables».

Asimismo, agregó, «los clientes asiáticos siguen demandando nuestros concentrados magnéticos por sus propiedades, calidad y bajas impurezas lo cual nos ha permitido continuar con despachos de hierro según nuestros programas». En ese contexto, a pesar del desafiante escenario local e internacional, la puesta en marcha del nuevo cargador de naves en Guacolda II ha permitido a CMP -según explicó- recuperar la capacidad de embarques que tenía antes del accidente ocurrido en noviembre de 2018, lo que permite sustentar un programa de embarques que retornaría a volúmenes de despachos superiores a 16MTM en este año.

En relación a cómo enfrentará CAP el proyectado escenario de reactivación del país, el ejecutivo dijo esperar que «el impacto en la actividad económica y social en la compañía sea controlado a partir de la implementación de todas las medidas que nos aseguren la continuidad operacional y la salud de nuestros trabajadores y público con quien nos interrelacionamos».

«Si bien existen factores exógenos de mercado que nos han afectado negativamente en el precio del acero por la baja actividad económica en el sector de infraestructura y construcción en Chile y en el ámbito internacional, esperamos una cierta recuperación de los mercados para fines de año y una reversión gradual a la normalidad, en la medida que como sociedad vayamos controlando la pandemia y reactivando la actividad económica y social», afirmó.